Antes de contar la mala experiencia que he tenido hoy, voy a proceder a explicar la realización de la ficha así como algunas observaciones que anoto.
Bien, la ficha de hoy ha consistido en hacer la pregunta: ¿Hace frío? (la verdad es que un poco aún, sí...). Des esta forma repasamos las prendas según su tiempo. Coloreamos una camiseta de color amarillo (reforzando también este color) y pegar recortes de papel de seda azul en una bufanda. Como veis, siempre se trabajan habilidades plásticas, además de conceptos específicos. En la misma línea he estado explicando el motivo del porqué los animales no utilizan ropa, y nosotros los seres humanos sí. En la ficha aparecían un oso panda y un patito.
*Observaciones: Creo que G. es un niño que cognitivamente va más lento que los demás. R. es un niño muy cabezón en cuanto a hábitos; y aunque estemos hablando de edades tempranas y no podamos arriesgarnos a afirmar ningún diagnóstico sospecho que A.L carece de atención y comprensión en el lenguaje.
Dicho esto, voy a relatar el mal rato que he pasado hoy:
Era la hora de comedor, y como todos los días G. es un niño que le cuesta mucho comer comida sólida. Hoy tocaba arroz, por lo que G. estaba conteniendo toda la comida en la boca sin tragar y llevaba así más de 30 minutos contados por mi reloj, tuve paciencia, y más paciencia (en ningún momento actué con malas palabras ni malos gestos, todo lo contrario) hasta que le dije a María, -María que te parece si le quito el plato a G. y lo aparto de sus compañeros y lo levantamos de la mesa para que así se de cuenta que tiene que seguir comiendo- María estuvo de acuerdo con mi idea, por lo que lo hice. Procedí a apartar a G. de la mesa y decirle de buenas maneras, aunque con una cara triste que debía de seguir comiendo sino no podría volver a sentarse junto a sus compañeros, y no tendría postre (fruta, el cual es su postre favorito). Pues en el momento que estaba ejerciendo este hecho, Rocío (coord.) se dirigió rápidamente a mí echándome un sermón. Un poco exaltada me dijo que así no debía de tratar al niño. La verdad es que me ha hecho sentirme muy mal, no pensaba que estuviera haciendo nada malo tal y como ella lo pintó delante de todos.
Desde ese momento, mi día se ha chafado por completo, me siento muy mal, mi intención no fue en ningún momento hacer sentir mal al niño, es más cuando Rocío (coord.) consiguió que comiera, G. me llamo a voces, a mí particularmente, para decirme que ya se lo había comido todo, con la intención de que yo le felicitara y me pusiera contenta.
La verdad que me ha hecho estar sensible durante todo el día, ya sé que no es nada grave pero me he quedado un poco cortada, y no me ha sentado bien la forma en que Rocío (coord.) me ha hablado. Por este motivo he preferido esperar a mañana para hablar de lo ocurrido.
Puaf.............
